Tatuajes y Salud. Arte sobre la piel o ¿riesgo silencioso?

Dr. Juan Raúl Gil Frías UNAM

Tijuana BC 27 de julio del 2025.- Cada vez es más frecuente ver personas, que, exigen llevar en la piel una historia, una emoción o una identidad. El tatuaje, antaño símbolo de marginalidad, hoy se convirtió en estandarte de expresión personal. Pero, detrás de este lienzo epidermis, existen preguntas médicas, aún sin obtener respuestas claras: ¿Qué es el contenido de las tintas inyectables? ¿Cuál es el riesgo sobre la salud más allá de lo estético?

Análisis recientes demuestran que las tintas que se inyectan para los tatuajes, contienen:

Colorantes Azoicos los cuales desprenden aminas aromáticas con alto potencial carcinógeno.

Metales Pesados: Tales como plomo cobre y níquel., las cuales son poderosamente causantes de reacciones inmunológicas y alergias.

Contienen además dichas tintas micropartículas de Carbono especialmente las tintas negras, estos carbonos viajan a través del sistema linfático para alojarse en tejidos y órganos.

Esto resulta aún más grave por la falta de Regulación Sanitaria a nivel internacional. Ni la composición química de estas sustancias son estandarizadas. En ciertos países la FDA emitió alertas por tintas contaminadas por bacterias.

Clínicamente los pacientes pueden padecer de Granulometría o Dermatitis Crónica en especial con aquellas tintas de tonos rojizos. Otro aspecto que se ha venido observando es que cuando estos pacientes tatuados, son sometidos a resonancias magnéticas se quejan de sensación de ardor, comezón y se genera distorsión de las imágenes.

En casos mucho más complejos se relaciona la tinta con linfomas cutáneas afectando al sistema inmune.

Toda esta información nos conlleva a plantearnos una cuestión muy importante: ¿Estamos normalizando un procedimiento invasivo sin conocer sus consecuencias? Lo cual nos parece muy irresponsable. No se trata de asustar ni mucho menos de alarmar sino de informar, quizá todos los tatuajes no son perjudiciales, pero si es muy necesario analizar la historia clínica ANTES de tatuarse,  ya que hay personas con padecimientos auto inmunes o neurodegenerativos o procesos infectocontagiosos. Revisar la procedencia y la certificación de las tintas.

En caso de remoción con láser, se deben de aplicar protocolos de detoxificación qué eviten la liberación masiva de compuestos tóxicos.

Como médicos no únicamente tratamos cuerpos; informamos, educamos, prevenimos y defendemos elecciones adecuadas en favor de la salud, y como sociedad debemos exigir que la estética no perjudique la salud. Recordemos que la piel tiene memoria, pero también es limitarte, lo que entra en la piel, debe siempre pasar por el filtro de la ciencia y la ética.

drgilfrias@gmail.com