Vehículos eléctricos, híbridos e híbridos enchufables: ¿Cuáles son sus diferencias?

Por Víctor M Aviña Alva

Tijuana BC 23 de junio de 2025.- Seguro que, cada vez más, escuchas hablar de coches eléctricos. El futuro parece apuntar en esa dirección para un transporte más limpio y eficiente. Pero entre tanta terminología, puede que te hayas preguntado: ¿qué significa realmente que un coche sea eléctrico, híbrido o híbrido enchufable? No te preocupes, es una duda muy común, y hoy vamos a desglosar estas diferencias de forma sencilla para que, la próxima vez, sepas exactamente de qué se está hablando y cuál podría ser la mejor opción para ti.

Vamos a explorar cómo funciona cada uno de estos tipos de vehículos, sus particularidades y por qué cada uno tiene un papel importante en la transición hacia una movilidad más sostenible.

Vehículos eléctricos (EV): El futuro, hoy

Empecemos por el más "puro" de todos: el vehículo eléctrico (EV, por sus siglas en inglés, Electric Vehicle), también conocido a veces como coche de batería eléctrica (BEV). La idea es muy simple: estos coches funcionan exclusivamente con electricidad.

●             ¿Cómo funcionan? No tienen motor de gasolina. En su lugar, tienen un motor eléctrico y una batería grande que lo alimenta. Se recargan conectándolos a un punto de carga (como si cargaras tu teléfono, pero en grande). La energía almacenada en la batería es lo único que los mueve.

●             Ventajas: Cero emisiones contaminantes en el tubo de escape (¡no tienen tubo de escape!), son muy silenciosos, el coste de "llenar el tanque" (recargar la batería) suele ser más barato que la gasolina, y muchos ofrecen una aceleración instantánea y suave.

●             Desventajas: La autonomía (cuántos kilómetros puedes recorrer con una carga) puede ser una preocupación para viajes largos, y la infraestructura de carga, aunque crece rápido, aún no está tan extendida como las gasolineras. El tiempo de recarga también es mayor que el de repostar gasolina.

Vehículos híbridos (HEV): Lo mejor de dos mundos

Los vehículos híbridos (HEV, por sus siglas en inglés, Hybrid Electric Vehicle) fueron los pioneros en combinar tecnologías y son, en cierto modo, un puente entre los coches de gasolina y los eléctricos puros.

●             ¿Cómo funcionan? Tienen dos motores: uno de gasolina y uno eléctrico, además de una batería pequeña. El coche decide automáticamente cuál motor usar o si usa ambos a la vez para optimizar el consumo. Por ejemplo, a bajas velocidades o al arrancar, puede usar solo el motor eléctrico; en carretera, el de gasolina; y al acelerar fuerte, ambos colaboran. La batería se recarga sola mientras conduces, frenas o con el motor de gasolina. No se enchufan a la corriente.

●             Ventajas: Consumen menos gasolina que un coche convencional, especialmente en ciudad. No tienes que preocuparte por la autonomía o por buscar un cargador, ya que el motor de gasolina siempre está ahí. Son más económicos que un EV puro y suelen tener un precio de entrada más accesible.

●             Desventajas: Aunque son más eficientes, siguen usando gasolina y, por tanto, emiten gases contaminantes (menos que un coche normal, pero más que un EV). La autonomía eléctrica es muy limitada, a veces solo unos pocos kilómetros.

Vehículos híbridos enchufables (PHEV): el punto intermedio con enchufe

Los vehículos híbridos enchufables (PHEV, por sus siglas en inglés, Plug-in Hybrid Electric Vehicle) son como una evolución de los híbridos, ofreciendo un equilibrio interesante.

●             ¿Cómo funcionan? También tienen un motor de gasolina y uno eléctrico, pero su batería es más grande que la de un híbrido normal. Esto les permite recorrer una distancia considerable (generalmente entre 40 y 80 kilómetros, o más, dependiendo del modelo) usando solo electricidad, como un coche eléctrico. La clave es que sí se pueden enchufar a la corriente para recargar su batería. Cuando la batería se agota o necesitas más potencia (en carretera, por ejemplo), el motor de gasolina entra en acción.

●             Ventajas: Te permiten hacer la mayoría de tus trayectos diarios (ir al trabajo, recados) en modo 100% eléctrico, sin emisiones y con bajo coste. Para viajes largos, el motor de gasolina elimina la "ansiedad por la autonomía". Son muy versátiles.

●             Desventajas: Son más caros que los híbridos convencionales y más complejos. Requieren acceso a un punto de carga para aprovechar su principal ventaja (el modo eléctrico extendido). Siguen teniendo emisiones de escape cuando usan el motor de gasolina.

El panorama actual: Un mundo en transición

La adopción de vehículos electrificados está creciendo a pasos agigantados. En 2023, las ventas globales de vehículos eléctricos (EV y PHEV) superaron los 14 millones de unidades, lo que representa un aumento de más del 35% respecto al año anterior, con un notable impulso en mercados como China, Europa y Estados Unidos (Fuente: Agencia Internacional de Energía, IEA, "Global EV Outlook 2024"). Esta tendencia subraya el cambio hacia opciones de movilidad más sostenibles.

Finalizando: ¿Cuál es para ti?

La elección entre un vehículo eléctrico, híbrido o híbrido enchufable depende mucho de tus necesidades, tu presupuesto y tus hábitos de conducción. Si tienes acceso a un cargador en casa o en el trabajo y haces muchos kilómetros diarios, un eléctrico puro te dará la máxima eficiencia y cero emisiones. Si buscas reducir el consumo de gasolina sin preocupaciones de autonomía ni enchufes, un híbrido es una excelente opción. Y si quieres los beneficios de la conducción eléctrica para el día a día, pero la flexibilidad de la gasolina para viajes largos, un híbrido enchufable podría ser tu compañero ideal.

Estamos en un momento emocionante para el transporte, donde las opciones son cada vez más variadas y se adaptan a distintas formas de vida, todo con el objetivo de movernos de manera más limpia y eficiente.