Cicuta
Jaime Flores Martínez
Robadera
Convencido que “el pueblo está contento con este gobierno porque es muy trabajador”, el gobernador de Baja California Jaime Bonilla Valdez debe saber que “ese pueblo” siente que les roba su dinero al inflar los recibos por concepto de consumo del agua potable.
¡La gente se siente asaltada!
El gobernador Bonilla Valdez debe entender por qué el abogado Carlos Atilano Peña se atrevió a confrontarlo.
Al intentar justificar los alarmantes incrementos del agua, le dio armas para desafiarlo.
Ya el viernes, Cicuta refirió que el jurista Atilano organizó una marcha ciudadana para exigir el cese de cobros excesivos por concepto de agua potable que padecen decenas de miles de familias de Tijuana.
El columnista aludió a doña Ofelia Salas, una ciudadana cumplida que se sobresaltó al observar que ahora su recibo le llegó por 6 millones de pesos.
¡Ella paga mensualmente alrededor de 400 pesos!
Los “locos” no son precisamente los recibos.
Sépase que con el argumento de la Pandemia, el organismo del agua denominado Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) retiró al personal encargado de la lectura de los medidores de agua y contrató a una empresa experta en calcular.
Este consorcio “estima” los consumos de agua, hace los recibos y los entrega.
Así de sencillo y... que se joda la gente.
No es exageración que los recibos llegan con cifras descabelladas como es el caso de doña Ofelia.
Evidentemente molesto por la actitud de Carlos Atilano, el gobernador Bonilla dijo el martes por la mañana que el abogado sería el responsable de los posibles contagios de COVID-19 que se generaran por la concentración de personas.
Bonilla dijo que estas acciones tenían un interés político, aunque se cuidó de cometer el error de acusar a sus odiados panistas.
Si bien debe existir un interés político, el gobernador debe entender que Carlos Atilano está resentido porque “lo utilizaron en la campaña del 2018” y al tomar MORENA el poder le dieron una patada en el trasero.
La existencia de ese resentimiento no quiere decir que la manifestación del martes fue injusta.
Bonilla debe saber que la gente está justificadamente indignada porque los recibos de agua llegan altísimos y en la mayoría de los casos son impagables.
La utilización del “tanteómetro” para determinar los cobros de agua es un insulto a la inteligencia de la gente.
Cierto que Jaime Bonilla no es el director de la CESPT, pero los inconformes saben que en su carácter de gobernador sacó su espada para amagar a los empresarios y comerciantes que tenían adeudos históricos con el organismo.
Al final de su informe diario presenta una pirinola que señala que “todos pagan”, pero no lo que le dé la gana al gobierno.
El gobernador Bonilla sabe que MORENA le quedó mal a Carlos Atilano, aunque también debe reconocer que al organizar esta marcha atiende una causa justa.
En pocas palabras, el gobernador debe reconsiderar y dejar de pegarle a las familias en el bolsillo, pues la “factura” puede llegarle el día de las elecciones.
Su seguridad de ganar la elección el próximo 5 de junio, debe ser aderezado con la certeza de que la gente está convencida que, inflar el cobro de los recibos de agua es igual que asaltarlos.
La gente siente que “le están robando” lo poco que tienen.
El interés o resentimiento de Carlos Atilano, es otra cosa.
Ah, y el gobernador acostumbra concentrar a muchos ciudadanos en las llamadas Jornadas por La Paz.
Que entonces… ¿el Covid es selectivo?
Positivo
Qué bueno que los brigadistas y combatientes de incendios forestales, reciban un reconocimiento a su Valiosísima labor.
Hace unos días recibieron equipo, en conmemoración del día nacional de los combatientes de incendios forestales, aunque sin duda, el agradecimiento es muchísimo más importante.
Esos combatientes de incendios arriesgan su vida en favor de todos y eso merece una profunda honra a su tarea.
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