Redacción
Tijuana.- Tras la noche violenta que se vivió en Tabasco este viernes, el dirigente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Marko Cortés, reprochó al Gobierno federal la política de "abrazos, no balazos", a la que responsabilizó de los hechos.
"Es muy doloroso y preocupante la violencia que ocurrió ayer en Tabasco, pero lamentablemente es lo que se vive a diario en el país. Esta ola de terror refleja el rotundo fracaso de la política de abrazos a los criminales", escribió el líder blanquiazul en sus redes sociales, y añadió que "construir la paz y la seguridad para las familias, será la prioridad del gobierno" de Xóchitl Gálvez, precandidata presidencial de la alianza integrada por el PAN con el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el de la Revolución Democrática (PRD).
Entre la noche del viernes y la madrugada del sábado, se registraron hechos violentos en al menos cinco puntos del Estado, entre ellos bloqueos carreteros con vehículos incendiados y un motín en el Centro de Reinserción Social (Cereso), además de rumores de un atentado contra el secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Hernán Bermúdez, mismo que fue desmentido.
El saldo fue de dos muertos y tres heridos, así como 16 automóviles quemados, de acuerdo con Bermúdez Requena, quien informó este sábado que se restableció la paz en el Estado, y que se trabaja en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional, Secretaría de Marina, Fiscalía General del Estado y la Dirección de Seguridad Pública en los municipios, aunque señaló que no hubo detenidos.
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