Redacción
Tijuana.- Luego de entablar un diálogo con el Partido Acción Nacional (PAN), el presidente Andrés Manuel López Obrador invitó al Revolucionario Institucional (PRI) a sumarse a las conversaciones, aunque aclaró que no habrá política de "toma y daca" para negociar las reformas a cambio de beneficios partidistas.
“Es bueno el diálogo, que depongan la actitud extremista de rechazar todo. Llegaron a una situación muy negativa”, aseguró el mandatario con respecto a las decisiones que los partidos opositores han asumido en el pasado, como rechazar incluso ascensos de los oficiales del ejército.
Explicó que para dichas promociones existen requisitos minuciosos que incluso consideran el peso corporal. "Cuando se está en vísperas de un ascenso o se aspira a ascender de grado, tienen que estudiar y estudiar y estudiar, bajan de peso, se les revisa todo el expediente y hay mucho cuidado y se es estricto", dijo, por lo que consideró que haber votado en contra de los ascensos en el Senado "es nada más oponerse por oponerse".
Agregó que el diálogo con ambas fuerzas políticas es positivo porque "hay iniciativas que estamos promoviendo, queremos que se conozca en qué consiste la reforma eléctrica, que se conozca más, que se debata más, que no haya cerrazón", y aseguró que escuchará sus argumentos: “si ellos señalan que es contraria al interés nacional, pueden decir, con elementos, ‘nos oponemos’ pero tenemos que poner por delante el interés de la nación”.
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