Redacción
Tijuana.- El empresario hondureño Roberto Castillo, directivo de la hidroeléctrica Desarrollos Energéticos Sociedad Anónima (DESA), fue declarado culpable de ser autor intelectual del asesinato de la activista ambiental e indígena Berta Cáceres.
Castillo Mejía, cuya culpa fue determinada por unanimidad, podría ser sentenciado a entre 20 y 30 años de prisión, según fuentes judiciales de Honduras. La condena para el empresario deberá ser precisada a inicios de agosto y en el plazo hasta entonces su defensa puede solicitar la impugnación del fallo.
La fiscalía calificó como fallo histórico la determinación de culpabilidad de Castillo, mientras el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh), la organización del pueblo indígena Lenca, al cual pertenecía Cáceres, asesinada en 2016, celebró la decisión y tuiteó: "significa una victoria popular no sólo para el Copinh, el pueblo Lenca y la familia de Berta Cáceres".
DESA era la compañía a cargo del proyecto Agua Zarca, a la que Cáceres se oponía, lo que la fiscalía señaló como motivo para el crimen por el que Castillo Mejía fue apresado el 2 de marzo de 2018, aunque el juicio comenzó hasta agosto de 2020.
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