Redacción
Tijuana.- La planta fotovoltaica que se instalaría en Mexicali y que se gestionó durante la pasada administración "es el principal factor que afecta a las finanzas públicas del Estado", informaron este miércoles autoridades del Gobierno de Baja California.
Durante la conferencia matutina de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, el secretario de Hacienda del Estado, Marco Moreno Mexía, informó que el proyecto, que se estableció sin permiso federal, será cancelado. Explicó que la licitación otorgada durante el periodo de Jaime Bonilla es ventajosa para Next Energy, la empresa que la construiría.
Asimismo, ante la negativa de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para autorizar el funcionamiento de la planta, determinada el pasado 25 de febrero, la actual administración estatal busca la forma de que la cancelación se realice "sin incurrir en ciertos eventos del contrato" que impliquen una pérdida económica para el Estado.
Por su parte, la mandataria Ávila Olmeda aseguró que la prioridad es proteger el patrimonio de la población bajacaliforniana, por lo que además de la estrategia que permitiría cancelar el proyecto sin generar una sanción para el Gobierno, un equipo jurídico examina el caso para eventualmente interponer las medidas y recursos legales "que sean necesarios contra quienes hayan puesto en riesgo el patrimonio de las familias de nuestro Estado", lo que podría incluir a funcionarios de la administración previa.